Mike Evans es mayormente recordado por su foto de 1976 de Ronald Reagan tomada en California, con un sombrero vaquero en el rancho del entonces candidato, cuando Evans estaba trabajando para la revista Equus. La genial foto fue utilizada más adelante para la campaña y como un modelo para una estatua de Ronald Reagan en la biblioteca presidencial, y a la muerte del presidente, apareció en las portadas de las revistas Time, Newsweek y People.
A partir de esa sesión de fotos, Evans y Reagan establecieron tal fuerte relación que el presidente le pidió que fuera su fotógrafo personal. En esa situación Evans capturó el intento de asesinato del presidente Reagan con tan sólo 69 días en la presidencia, y por poco él mismo eludió las balas del asesino. Sus hojas de contactos claramente manifiestan la amplia brecha entre la naturaleza cotidiana del evento sindical en el Hilton de Washington, donde Reagan estuvo previamente hablando, y la magnitud caótica de la tentativa de asesinato y pelea que se produjo inmediatamente en el exterior.
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Mike Evans is best remembered for his 1976 photo of Ronald Reagan wearing a cowboy hat taken at the then candidate’s California ranch while Evans was working for Equus Magazine. The genial photo was later used for campaign buttons and as a model for a statue at the Reagan presidential library, and on the president’s death, appeared on the covers of Time, Newsweek and People magazines.
Starting with that photoshoot, Evans and Reagan established a strong rapport that the president asked him to be his personal photographer. It was in such capacity that Evans captured an assassination attempt on the president just 69 days into the Reagan presidency, and narrowly evaded the assassin’s bullets himself. His contact sheets clearly highlighted the wide chasm between the quotidian nature of the trade union event at Washington Hilton where Reagan was previously speaking and the chaotic enormity of the assassination attempt and the brawl that immediately ensued outside.
...y mientras tanto 